¿ QUÉ ES UN ENTEÓGENO?
Se considera enteógenos a aquellas sustancias vegetales y animales que permiten conectar con «entheos» , es decir, con la divinidad interior, con el «origen divino» ( entheo + genesis) . Es la misma raíz griega de la palabra teología , Zeus ( teus, deus), entusiasmo ( en theos , «el que vive en lo divino».
Entre las medicinas naturales que encontramos en esta familia están la ayahuasca, el peyote, los hongos, el yopo, el iboga, san pedro, el bufo alvarius…También se considera un enteógeno por la mayor parte de la comunidad afín a los psicoactivos el LSD.
Otras sustancias como la salvia divinorum que es un «onirógeno» o el éxtasis ( MDMA) que es un «entactógeno» no entran dentro de esta categoría.No entran dentro de esta categoría los «alucinógenos» como la datura o el floripondio.
El término enteógeno ha tenido un gran éxito que le ha dado una categoría de honor y de rigor a estas medicinas que han demostrado ampliamente ya su potencial sanador, psicoterapéutico y evolutivo.
DE DONDE SURGIÓ EL TÉRMINO ENTRÓGENO
Este término surgió para relegar a la palabra psicodélico que estaba llena de las connotaciones lúdicas de las revoluciones de finales de los sesenta y principios de los setenta y darle un rigor científico aunque en su origen etimológico la palabra tuviera un significado muy profundo y bello: psicodélico (manifestación de lo que estaba oculto).
He de decir al respecto que afortunadamente es imposible separar lo lúdico en el sentido de gozarse , disfrutarse y viajarse de la propia experiencia liberadora y que aunque pueden existir momentos duros y confrontadores una vez atravesados éstos desnmbocamos inevitablemente en la comprensión.
Precisamente la noción de la necesidad de sufrir para aprender y del sufrimiento como herramienta didáctica es una de las estrategias del programa mental de culpa para manternos en sus redes pues no existe otra manera de «dar frutos» que no sea disfrutando.
LOS ENTRÓGENOS NO SON DROGAS
Por otra parte los enteógenos no son drogas pues lejos de evadirte de la realidad te acercan a ella y además no producen ningún tipo de tolerancia física, abstinencia o adicción; por lo tanto la mayoría de ellos no son ilegales (ayahuasca, bufo alvarius, yopo, iboga, san pedro) y son utilizados para profundizar y desactivar desde el origen los mecanismos y programas que interfieren con nuestra libertad y paz interior llevándonos a una auto-exploración y redescubrimiento de nuestro verdadero Ser a través del Amor.